Por la suba de un impuesto, podría haber otro aumento en el precio de la nafta

Es por la actualización del impuesto a los combustibles, que el gobierno anterior prorrogó desde hace más de dos años hasta el 1° de febrero.

NACIONALES26/01/2024El Glaciar TDFEl Glaciar TDF
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Por la suba de un impuesto, podría haber otro aumento en el precio de la nafta

Con un ojo puesto en la desaceleración de la inflación y el otro en las cuentas fiscales, el ministro de Economía, Luis Caputo deberá definir en los próximos días un tema clave para ambos frentes: la actualización del impuesto a los combustibles.

En medio de la negociación en el Congreso para avanzar con el capítulo fiscal de la Ley Ómnibus, esencialmente con la suba de retenciones que cosecha el firme rechazo de la oposición más dialoguista, la suba del impuesto al combustible es referida como una alternativa para compensar los menores recursos si el oficialismo no logra avanzar en su plan. Sin embargo, aun cuando finalmente lograra ese apoyo, la suba del impuesto a los combustibles luce inevitable. También será inevitable, en consecuencia, el aumento en el precio de la nafta. Como corolario, la expectativa de una inflación que profundice la tendencia a la baja durante el mes próximo, cuando además se producirá la suba de tarifas, también quedará interpelada.

El denominado impuesto a los combustibles son en rigor dos tributos de suma fija -el impuesto a los combustibles líquidos (ICL) y al dióxido de carbono- que se ajustan trimestralmente desde 2018 de acuerdo a la evolución de la inflación. Ese ajuste impacta en su totalidad en el precio final de la nafta.

El Gobierno deberá decidir la próxima semana en qué medida actualizará el impuesto, lo que determinará el impacto en el precio de la nafta. Actualmente, entre ambos tributos, la suma fija asciende a unos $20 por litro, lo que representa menos del 3% del precio del combustible cuando históricamente implicó más de 10% del precio de surtidor. Vale aclarar que se trata de un impuesto de muy fácil recaudación y también muy alta recaudación, en situaciones normales. Sin embargo, su peso en la recaudación total se licuó de manera drástica en los últimos años, al punto que durante el año pasado creció, en términos nominales, apenas 22% comparado con una inflación 10 veces mayor.

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